domingo, 2 de diciembre de 2018

Esclavos de la consigna.Jorge Edwards


Gorge Edwards es un escritor y crítico chileno, poco conocido en España. (1931 Chile).

En este ensayo, que recomiendo, hace un análisis sobre el partidismo, el fanatismo y la consigna política que esto conlleva.Aunque Edwards podría estar en ese filón de autores procedentes de países de habla hispana que tanto premio se llevaron, su obra es para una minoría, no cuenta historias románticas ni de saga familiares, su escritura aunque elegante es ácida. Lo suyo es la crítica.
 El país de la consigna por excelencia fue la Cuba de Castro, allí la consigna fue norma diaria desde los gusanos y la gusanera, hasta cualquiera que pudiera cuestionar la revolución, y con un vecindario haciendote el vacío. Fuimos muchos lo que creímos en su proyecto, en un país donde una revolución se hacía necesaria, de ahí a lo que derivó hizo que muchos termináramos  asqueados.El pueblo aunque supuestamente tenga cultura se aborrega, bien por miedo a perder la vida o lo poco que tengan, sin contar los honores y glorias que dichos personajes te puedan dar.

Edwards hace un recorrido por su vida como diplomático, se movió por cafés y calles de Europa y conoció lo que otros describían. Habla también de Neruda, otro idolatrado, yo del poeta leí una crítica muy ácida sobre como se comportó con su hija, su opinión no es positiva, pero no es el único, y Neruda sigue estando en los altares. Yo me pregunto: ¿Se valora solo la obra, o también a quien la escribió? Las dos cosas van metida en el mismo paquete, lo tengo comprobado.De Carlos Fuentes en cambio si habla bien.

Edwards estuvo de diplomático en varios países, uno de ellos Cuba, y Castro lo expulsó, quizá ahí fue donde se comenzó a gestar este libro, la consigna se extendió  y Cortázar llegó a decir: Jorge es mi amigo pero no tengo ganas de verlo, Cortázar temía enemistarse con Castro. 

Este libro es de rabiosa actualidad, las consignas hoy en España están a la orden del día, y procura no alejarte mucho, porque te pueden colocar un San Benito, se da en ambos lados, pero la izquierda es quizá más maniquea en este sentido.


Stasiland. Historias tras el muro de Berlín.Anna Funder.

Antes de hablar del libro quiero comentar que no es para todos, ni muchos menos para los que buscan historias romanticas o sencillas donde e...