martes, 9 de julio de 2019

Cuando los milagros suceden.Joan Wester Anderson

Este es un libro de testimonios sobre los milagros; aquí en este blog tiene cabida, se que estos libros tienen mala prensa,por diversos motivos.

La pregunta del millón¿Existen los milagros? ¿ Y los ángeles? En realidad el libro va más de ángeles, pero estos, para los que creemos en ellos, son intermediarios que realizan milagros o dicho de otro modo ayudan en momentos difíciles.

Voy a narrar algunos casos.

El primer caso es narrado por la autora y yo lo resumo,sin entrar  en detalles.

El anillo de compromiso perdido
En 1971, compré una casa en Chicago y conocí a una vecina de nombre Lynne Gould, un buen día apareció en la puerta con sus hijos para darme la bienvenida, los Goulds vivían justo detrás mía, en seguida sentimos una empatia especial y quisimos conocer nuestras creencias, Lynne parecía distendida cuando hablaba de Dios, me hablaba de su amor, tampoco pensé nunca que los milagros sucedieran a la gente corriente como yo. 

Una mañana Lynne  apareció por casa y en ese momento yo estaba en el jardín,había perdido mi alianza de compromiso, Lynne se acercó y me preguntó que cuando me había dado cuenta...Me llevó a una zona del jardín y me dijo que me arrodillara junto a ella, y comenzó a rezar en voz alta pidiendo  que apareciera, a pesar de todo el follaje que había, y  de pronto vio algo brillar,era mi alianza. 

A raiz de este caso la autora se sintió intrigada y decidió investigar, si aquello había sido una simple casualidad o hubo una intervención sobrenatural.
Un milagro es algo que contradice las leyes naturales, algo así como un imposible, y suelen ser sucesos positivos, si hay una explicación no es un milagro.No todas las religiones creen en ellos, pero ese es un tema que no voy a tocar pues no me concierne, aunque el libro habla de ello.

Cuando la autora escribió el libro, comenzó a recibir llamadas de personas que habían tenido encuentros con ángeles,en definitiva es lo mismo, una intervención sobrenatural.

El poder de la oración.
Es uno de los temas tratados en el libro, pero en mi opinión hay que hacerlo con mucha fe, orar como un loro no tiene sentido. La autora nos narra un caso que le llegó.

Janice Stiehler vivía en el estado de N.Y. Su hijo jugaba con un equipo de futbol, los horarios habían cambiado y tenía que coger un metro bien tarde en la estación de Pensilvania. Aquella noche Janice se despertó a la 1:10 de la madrugada, un golpe seco y estruendoso se produjo en la ventana de su dormitorio, pero el cristal no estaba roto, aquello le produjo un sobre salto, se levantó y comenzó a orar por su hijo.Una hora mas tarde la llamaron del hospital, los chicos habían tenido una discusión y en el trascurso de la cual, el brazo de su hijo había atravesado un cristal,hubiera podido ser un desastre pero tuvo suerte, quedó en el susto. Este sería un caso de intervención divina como resultado de la oración.
En opinión de la autora la oración no siempre es atendida, porque Dios dice no, no es lo que la persona necesita.Ella propone dejar los asuntos en manos de Dios y que sea quien decida, aunque el resultado no sea de nuestro agrado.

Este es uno de los casos que me ha gustado.
Sería una intervención angélica.

Emili Weichman era una niña de salud delicada.En Septiembre de 1991 cuando tenía cinco años de edad, viajaba con sus padres para visitar a sus abuelos,durante la noche la niña se despertó y le dijo a su madre que se encontraba mal, el hospital más cercano estaba a 100 Kms, enfilaron hacia él, y a la entrada a la ciudad fueron viendo paneles indicativos, cuando ya todo pasó, le comentó al medico, menos mal que hay paneles indicativos por toda la ciudad, el medico dijo con sopresa:¿ Paneles indicativos? Yo vivo a 6 Kms de aquí y no hay un solo panel indicativo. Marlene la madre de Emily, pensó que el médico estaba equivocado y cuando hicieron la ruta inversa de camino a su casa se dieron cuenta que no había ningún panel indicativo.

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El caso de Jhon.

Jhon viajaba en un barco velero cuando una ola hizo que el barco diera la vuelta, y jhon cayó al mar, de pronto oyó una voz venida de la nada que le decía: aléjate, aléjate, comenzó a perder fuerza, cuando ya iba a sucumbir, unos brazos potentes lo sostuvieron, esos brazos misteriosos le llevaron a la orilla. (conozco un caso similar de alguien conocido)
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El libro narra cientos de casos, la autora ha querido reflejar que más allá de lo que nuestros ojos ven, hay alguien que en determinados momentos nos ayuda.Y que no hay que perder las esperanzas.








Caballero Bonal. Notas

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