Francisco Nuñez Roldan.Sevilla 1951, es un escritor e investigador que tiene publicado varios libros relacionados con la investigación, como la Vida cotidiana en la Sevilla del siglo de oro, entre otros. Yo os voy a hablar de este ensayo que leí hace tiempo, pero cuando se busca información sobre la prostitución en España nos topamos con un articulo sobre el panorama actual.
El autor se remonta a la época de los Tartessos pero poca información hay sobre las mujeres publicas en esa época, no será ya hasta la época romana cuando se pueda hablar de prostitución propiamente dicha, cuenta el autor que Rómulo y Remo fueron amamantados por una mujer, una mujer que conseguía dinero por la fornicación, y no por una loba, de ahí que lupanar arraigara como lugar de encuentro para fornicar.
Las iberas cotizadas por su belleza, y cualidades innatas para la danza fueron llevadas en gran cantidad a los lupanares romanos, las más buscadas, las gaditanas, Puellae gaditanae, dice el autor que no estaba protegida pero si tolerada, en esta historia de la prostitución el autor aborda temas históricos como los baños y la costumbre de lavarse, entre otros, importadas todas de Roma.
Durante la época visigoda se legisló duro contra ella, la religión arriana y la católica bebían de las mismas fuentes y se jugaban el reconocimiento de la población y el poder, en aquellos siglos la Iglesia tenía muchos periodos de restricción para la práctica del sexo, y las prostitutas eran muy demandadas.
Algunos clérigos tenían a una mujer en la vivienda, muchos fueron desterrados por lujuriosos. La España musulmana fue mucho más laxa, los lupanares fueron situados en zonas concretas que no pudieran molestar a la población, eran conocidos con el nombre de Dar Aljarash;en la España musulmana todas las prostitutas se depilaban,también algunas mujeres por considerarlo medida higiénica.En Córdoba hubo una muy celebre llamada Wallada. En el califato cordobés hubo proxenetas y alcahuetas.Ibn Hazm de Córdoba escribió tratados y poemas sobre el amor, el más conocido fue El collar de la paloma, pero no aparece el amor mercenario en la obra del poeta.En aquellos años las casas de tolerancia eran conocidas como casa llana.Al jatib un médico cordobés daba consejos para estrechar vaginas.
En la edad media se impuso la figura de la barragana,mujer que convivía con un hombre sin estar casada, fue muy usada por clero y frailes. Los prostíbulos en estos siglos comenzaron a estar organizados y resultaban rentables, el propietario del mismo solía ser el señor del lugar, el cabildo civil o religioso, recibían el nombre de mancebías,y se podían arrendar.El sentimiento imperante era: La prostitución es un mal pero menor.
Un viajero francés del S.XV describe así un burdel de Valencia: espacioso, cerrado, con viviendas, tabernas,un médico y la tarifa de 4 maravedíes por prestación.
Durante el renacimiento las mancebías adquirieron carta de oficialidad, los dueños recibían el nombre de padre de la mancebía, tenían buenos margenes de beneficio, el alojamiento les costaba 20 maravedíes, comían carne de puerco o carnero y dos libras de pan, así como medio cuartillo de vino en cada comida.Algunas ejercían por libre.En los lupanares había judías y moras, otro grupo eran las esclavas, algunas se vendían ya como prostitutas para que el nuevo dueño supiera a que atenerse,de ahí nacieron muchos mulatos y mestizos.
En Sevilla en el S.XVI llegó a haber 300 burdeles.
En 1516 Carlos V dictó una pragmática sobre las mancebías.
El autor aborda la prostitución en las Indias españolas pero para un resumen se hace exhaustivo.
Hay un capítulo titulado Las putas y el Clero.
Moratín habla de la fama que tenían los altos cargos del sur, había coplillas, se decía que de todas las ordenes religiosas, los jerónimos eran los más dotados, una meretriz le confesó a un fraile carmelita que un colega de la orden le había tirado trece cañonazos con bala.Mientras que en Francia llegaban a presidir salones literarios aquí seguían sin poder salir a la calle, aquí solo primaban las virtudes domesticas y por eso la mujer no debía pisar la calle.
Tiempos modernos.
La prostitución se ha visto afectada por los avances técnicos y por los mismos vaivenes de la historia, hoy la prostitución sigue siendo un sucedáneo del amor.En 1943 había un censo de prostíbulos en España, Barcelona tenía 104,Córdoba 45, Murcia 45...En Madrid siempre hubo burdeles de postín,no entraba cualquiera, había un riguroso derecho de admisión; el catalán adinerado solía frecuentar los de Madrid o Bilbao, hubo casos de enamoramiento y matrimonio;el autor cuenta el caso de un funcionario, ella había estado con el hermano, éste al verla intentaba recordar su rostro hasta que vio un lunar en la zona del pecho y se acordó..
Y doy por terminado este resumen.
Las iberas cotizadas por su belleza, y cualidades innatas para la danza fueron llevadas en gran cantidad a los lupanares romanos, las más buscadas, las gaditanas, Puellae gaditanae, dice el autor que no estaba protegida pero si tolerada, en esta historia de la prostitución el autor aborda temas históricos como los baños y la costumbre de lavarse, entre otros, importadas todas de Roma.
Durante la época visigoda se legisló duro contra ella, la religión arriana y la católica bebían de las mismas fuentes y se jugaban el reconocimiento de la población y el poder, en aquellos siglos la Iglesia tenía muchos periodos de restricción para la práctica del sexo, y las prostitutas eran muy demandadas.
Algunos clérigos tenían a una mujer en la vivienda, muchos fueron desterrados por lujuriosos. La España musulmana fue mucho más laxa, los lupanares fueron situados en zonas concretas que no pudieran molestar a la población, eran conocidos con el nombre de Dar Aljarash;en la España musulmana todas las prostitutas se depilaban,también algunas mujeres por considerarlo medida higiénica.En Córdoba hubo una muy celebre llamada Wallada. En el califato cordobés hubo proxenetas y alcahuetas.Ibn Hazm de Córdoba escribió tratados y poemas sobre el amor, el más conocido fue El collar de la paloma, pero no aparece el amor mercenario en la obra del poeta.En aquellos años las casas de tolerancia eran conocidas como casa llana.Al jatib un médico cordobés daba consejos para estrechar vaginas.
En la edad media se impuso la figura de la barragana,mujer que convivía con un hombre sin estar casada, fue muy usada por clero y frailes. Los prostíbulos en estos siglos comenzaron a estar organizados y resultaban rentables, el propietario del mismo solía ser el señor del lugar, el cabildo civil o religioso, recibían el nombre de mancebías,y se podían arrendar.El sentimiento imperante era: La prostitución es un mal pero menor.
Un viajero francés del S.XV describe así un burdel de Valencia: espacioso, cerrado, con viviendas, tabernas,un médico y la tarifa de 4 maravedíes por prestación.
Durante el renacimiento las mancebías adquirieron carta de oficialidad, los dueños recibían el nombre de padre de la mancebía, tenían buenos margenes de beneficio, el alojamiento les costaba 20 maravedíes, comían carne de puerco o carnero y dos libras de pan, así como medio cuartillo de vino en cada comida.Algunas ejercían por libre.En los lupanares había judías y moras, otro grupo eran las esclavas, algunas se vendían ya como prostitutas para que el nuevo dueño supiera a que atenerse,de ahí nacieron muchos mulatos y mestizos.
En Sevilla en el S.XVI llegó a haber 300 burdeles.
En 1516 Carlos V dictó una pragmática sobre las mancebías.
El autor aborda la prostitución en las Indias españolas pero para un resumen se hace exhaustivo.
Hay un capítulo titulado Las putas y el Clero.
Moratín habla de la fama que tenían los altos cargos del sur, había coplillas, se decía que de todas las ordenes religiosas, los jerónimos eran los más dotados, una meretriz le confesó a un fraile carmelita que un colega de la orden le había tirado trece cañonazos con bala.Mientras que en Francia llegaban a presidir salones literarios aquí seguían sin poder salir a la calle, aquí solo primaban las virtudes domesticas y por eso la mujer no debía pisar la calle.
Tiempos modernos.
La prostitución se ha visto afectada por los avances técnicos y por los mismos vaivenes de la historia, hoy la prostitución sigue siendo un sucedáneo del amor.En 1943 había un censo de prostíbulos en España, Barcelona tenía 104,Córdoba 45, Murcia 45...En Madrid siempre hubo burdeles de postín,no entraba cualquiera, había un riguroso derecho de admisión; el catalán adinerado solía frecuentar los de Madrid o Bilbao, hubo casos de enamoramiento y matrimonio;el autor cuenta el caso de un funcionario, ella había estado con el hermano, éste al verla intentaba recordar su rostro hasta que vio un lunar en la zona del pecho y se acordó..
Y doy por terminado este resumen.