Un
relato ambientado en Marruecos .En 1995 un periodista corresponsal de Tv es
llamado por una anciana residente en
Melilla para que investigue unos hechos acaecidos en el Rif en 1921; este es el
detonante de la historia.
Algunas
notas sobre el desastre de Anual poco conocido por las generaciones
actuales , una descripción de la Melilla de aquellos años y el autor entra de
lleno en la historia.
En
aquellos años había algún que otro burdel en Melilla y un fotógrafo ingles
conocido ( Holbroock) hizo fotos de distintas perspectivas del conflicto, un
día entró en el burdel y fotografió a un grupo de mujeres, la anciana guardaba
la foto que en estos momentos enseñaba al periodista. Una de las mujeres que
aparecían tenía ojos de gacela y llevaba un niño en el regazo. ¿ Quien era, preguntó el periodista? Lucia Osmán hija
de un soldado español y de una mujer marroquí, fue vendida a un burdel cuando
tan solo tenía 12 años.
Lucia
Osmán era la anciana que estaba delante de él y que poco a poco va desgranando
sus recuerdos.
Su
padre un borracho y jugador amancebado
con una musulmana a la que maltrataba, su madre bereber de la región de Nekor,
una infancia de hambre y miedo, su madre murió en 1918 y su padre la vendió al
burdel, podía haber sido mucho peor si se hubiera quedado con él.
El
local donde me dejó era de lo mejorcito, allí solo entraban de tenientes para
arriba.Estuve en aquella casa tres años, y tengo que confesar que aquello era
mejor que lo que mi padre ofrecía en casa, sabanas limpias , pastilla de jabón,
agua fresca, comida, licores y juergas de aquí te espero.
La
dueña del chiringuito conocía bien el oficio, así que el primer año me tuvo de
criada y cuando cumplí 14 me buscó un oficial joven para que me iniciara en el
arte del “amor”, era importante que no aborreciera el trabajo que iba a hacer
porque luego eso se nota, es conveniente que conozcas a distintos tipos de
hombres y que tengas maña con ellos.
Me
cambiaron el nombre, siempre he pensado que el nombre de la persona tiene que
ver con la identidad ( eso dicen y creo que hay mucha verdad en ello) ahora era
la pequeña luciérnaga pero terminé siendo Lucía y con quince años aprendí el
oficio; Lucia resultó ser prodigiosa (*) dentro del mundo de la prostitución
también hay normas, la prostituta se tiene que hacer respetar aunque el negocio
sea miserable.
Algunos
se encaprichaban conmigo porque yo no estaba disponible para todo el mundo,
pero era la dueña la que decidía quien iba conmigo-
Por
el burdel aparecían personajes muy curiosos, desde el General Silvestre hasta
algún alemán o ingles de profesión fotógrafo pero que posiblemente fuera otra
cosa, eran años de espías y también de señorito adinerado, por allí aparecía
uno pero la dueña no lo tragaba y aunque se dejaba dinero no tenía nada que
hacer con los chicas, además estaba sifilítico.
La
historia tiene más bifurcaciones, pero esto es un resumen.
Cuando
alguien escribe o investiga unos hechos tiene que ser creíble
porque sino la historia se derrumba, le sucede lo mismo que al guión
cinematográfico. Y al reportaje que nuestro reportero estaba haciendo sobre la
guerra del Rif le faltaba algo y ese algo vino de Lucia Osmán.
El pasado no
es modificable pero hay hechos que a veces permanecen ocultos y cuando salen a
la luz la historia si puede tener otras lecturas.
(*)
Dentro del mundo de la prostitución hay de todo, lo mismo que hay profesores
buenos y malos también hay prostitutas que son muy demandadas, hay que nacer
para ello por increíble que parezca.
PD: A los que hemos vivido en Marruecos habrá muchos nombres que nos suenen, el General Varela, la familia Benarroch y alguno más.
PD: A los que hemos vivido en Marruecos habrá muchos nombres que nos suenen, el General Varela, la familia Benarroch y alguno más.
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